lunes, julio 17, 2006

BROKEN HEART


Ya estoy aquí de nuevo. Vuelvo a escribir. La vida me ha hecho parar, tomarme un descanso, obligado. Lo dicen las cajetillas de tabaco, pero pocos nos lo creemos: el tabaco mata. Os juro que es cierto, conmigo casi lo consigue. Me he escapado por los pelos. Una serie de infartos, uno grande y varios de pequeños, me han tenido atado a una cama unos cuantos días. He visto el final cerca, muy cerca y he tenido mucho tiempo para pensar.
La vida tiene que cambiar. Debo vivir de otra manera, desde luego, y siendo todo aparentemente igual, debe ser todo muy distinto. Debo escribir más, escuchar más música, dedicarle más tiempo a la lectura, y no sólo más tiempo, sino tiempo de más calidad. Debo sonreír más y sufrir mucho menos. Debo acercarme más al mar y alejarme más a menudo de la luz de los fluorescentes.
Debo cuidar más mi corazón, uno de mis órganos preferidos…
Y ahora, como en las antiguas máquinas del millón... ¡¡¡bola extra!!! La vida me ha concedido otra partida para jugar.